Se llama Requisa

-Sobre la quiebra de Aeromar-

Silvino Vergara Nava

«Una vez que llega al poder, el líder

populista de izquierda o de derecha…

El razonamiento es siempre: No hay

tiempo que perder; la gente esta

primero que las instituciones […]

el líder populista encuentra una

buena caja de resonancia en las

redes sociales».

Salvador Cárdenas Gutiérrez

El populismo de izquierda o bien, de derecha es lo mismo. Hay que recordar que el populismo puede ser de cualquier tipo de inclinación política, finalmente, es un gobierno que se caracteriza por la falta de conocimiento de las instituciones del sistema jurídico y del Estado de derecho, poca sensibilidad con la población, salvo con los más emblemáticos, no con la población más vulnerable, lo cual provoca omisiones graves en las decisiones gubernamentales como esta sucediendo actualmente con la quiebra de la aerolínea Aeromar.

Ya tenemos en la historia de México la experiencia con el gobierno de hace dos sexenios que, con la quiebra de Mexicana de Aviación, no pasó absolutamente nada, fue omiso el gobierno federal, es más, lo único que sucedió es que, aparecieron módulos de la Procuraduría Federal de Protección al Consumidor para “resguardar y velar” por los intereses de los pasajeros que no pudieron hacer efectivos sus boletos, ni la devolución de su dinero.

Lo mismo sucede actualmente, y aún más grave, con la quiebra de Aeromar, en donde el Estado no ha intervenido, (que no debería ser una característica de la izquierda moderna) en la quiebra de esa compañía, que deja varados a cientos de pasajeros y desde luego, a los empelados de esa empresa. Esta quiebra es aún más grave que la que correspondió a Mexicana de Aviación, primero, por la experiencia de ese tiempo, lo que sucedió al final con los trabajadores, pues resulta necesario en la actualidad el uso de aerolíneas para llegar a muchos rincones del país, particularmente respecto a las rutas que abarcaba esta aerolínea Aeromar. Hoy lejos de la perdida del dinero por los boletos ya comprados, el problema principal, es que se han roto una gran cantidad de puentes aéreos que implican el retraso e incomunicación a muchas regiones del país.

Tal es el caso de Ixtepec, Oaxaca, que contaba con vuelos de esa aerolínea desde la ciudad de México a aquella población del Istmo, una de las zonas más afectadas por la pobreza, el crimen organizado, el narcotráfico, los problemas laborales y de tenencia de la tierra con las zonas en donde se han instalado plantas de energía eólica, y que hoy se quedó a su suerte.

Es del conocimiento de cualquiera que conoce de esas regiones, que es muy peligroso y brumoso acudir a esos lugares por medio de autobuses, pues bien, hoy se ha quedado más incomunicado que de costumbre, no únicamente esa población, que por cierto el avión bajaba en una zona militar, sino de una gran región del Estado de Oaxaca.

Y es que el populismo –de izquierda o de derecha- desconoce de los mecanismos con que cuenta para rescatar ese tipo de servicios públicos, a lo que se le denomina como: “Requisa”, que esta prevista en el artículo 112 de la ley de vías generales de comunicación, y que tiene por objeto preservar una determinada actividad económica, en particular el servicio público de transporte aéreo.

La Ley de Vías Generales de Comunicación, una ley de 1940, establece en su artículo 112, textualmente: “En caso de guerra internacional, de grave alteración del orden público o cuando se tema algún peligro inminente para la paz interior del país o para la economía nacional, el Gobierno tendrá derecho de hacer la requisición, en caso de que a su juicio lo exija la seguridad, defensa, economía o tranquilidad del país, de las vías generales de comunicación, de los medios de transporte, de sus servicios auxiliares, accesorios y dependencias, bienes muebles e inmuebles y de disponer de todo ello, como lo juzgue conveniente. El Gobierno podrá igualmente utilizar el personal que estuviere al servicio de la vía de que se trate cuando lo considere necesario. En este caso, la Nación indemnizará a los interesados, pagando los daños por su valor real, y los perjuicios con el cincuenta por ciento de descuento. Si no hubiere avenimiento sobre el monto de la indemnización, los daños se fijarán por peritos nombrados por ambas partes y los perjuicios, tomando como base el promedio del ingreso neto en los años anterior y posterior a la incautación. Los gastos del procedimiento pericial serán por cuenta de la Nación”.

La requisa es una forma en que, el Estado interviene sobre una concesión, un servicio público que es necesario no dejar de suministrar para la población, se insiste, sobre todo en el caso de las rutas con que contaba esa aerolínea, el que exista responsabilidad penal por parte de los socios, que existan otro tipo de responsabilidades de esos propietarios es otra cosa, pero, lo que si es un hecho es que, como gobierno de izquierda debió de intervenir vía la requisa para mantener el servicio publico, lo cual desde luego, no lo haría un gobierno de derecha, pero resulta que en estos tiempos de falta de identidad de las propias políticas publicas, es que se suceden estos casos en donde se deja a su suerte a la población, a los trabajadores, a los pasajeros, a México, por la ausencia de algo que se llama requisa. (Web: parmenasradio.org)

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